Los atascos
Una de las sensaciones más placenteras que conozco es ver noticias de atascos kilométricos en la tele de casa. Sí, sé que es un pensamiento un poco mezquino, pero qué le voy a hacer, me sale natural.
Llega un puente, la gente se echa a la carretera y venga, siete horas para llegar a Valencia. Y lo peor de todo es que van todos al mismo sitio, así que luego atascos para poner la toalla, atascos en las duchas, atascos en las terracitas, etc.
El caso es que uno se queda en la ciudad, medio vacía, y disfruta de dos cosas: eso, ver los atascos por la tele; y de la propia ciudad, que con mucha menos gente es mejor ciudad.
De todos modos, para llegar a ese pensamiento mezquino, hay que haberse tragado algún que otro atasco y haber pensado cosas como teníamos que haber salido antes, con lo bien que íbamos en tren o, simplemente, me cago en su puta madre.
Y es que los atascos tienen su misterio. Porque vale, cuando hay cientos de miles de personas que salen de Madrid a las 15:05, pues es normal que se monten esos cristos. Pero hay ocasiones más extrañas, en las que vas a 140 y, al rato, atasco. Estás parado 5 minutos y en seguida otra vez a 140. Dicen que es el efecto en cadena provocado por alguien que frena. Pero para mí que hay algún hijoputa que va el primero y que se para y que dice, Mari, hacemos un atasco, ¿o qué?. Y Mari dice que sí.
Llega un puente, la gente se echa a la carretera y venga, siete horas para llegar a Valencia. Y lo peor de todo es que van todos al mismo sitio, así que luego atascos para poner la toalla, atascos en las duchas, atascos en las terracitas, etc.
El caso es que uno se queda en la ciudad, medio vacía, y disfruta de dos cosas: eso, ver los atascos por la tele; y de la propia ciudad, que con mucha menos gente es mejor ciudad.
De todos modos, para llegar a ese pensamiento mezquino, hay que haberse tragado algún que otro atasco y haber pensado cosas como teníamos que haber salido antes, con lo bien que íbamos en tren o, simplemente, me cago en su puta madre.
Y es que los atascos tienen su misterio. Porque vale, cuando hay cientos de miles de personas que salen de Madrid a las 15:05, pues es normal que se monten esos cristos. Pero hay ocasiones más extrañas, en las que vas a 140 y, al rato, atasco. Estás parado 5 minutos y en seguida otra vez a 140. Dicen que es el efecto en cadena provocado por alguien que frena. Pero para mí que hay algún hijoputa que va el primero y que se para y que dice, Mari, hacemos un atasco, ¿o qué?. Y Mari dice que sí.
12 comentarios
María Moliner -
farcman -
los post que envíe no son iguales. Aparte de la hora, hay OTRA DIFERENCIA.
¿te atreves?
piter -
besos laborables.
farcman -
P.D. Esta vez, sólo tardé 5 horas.
farcman -
P.D. Esta vez, sólo tarde 5 horas.
Jeff -
Hay demasiados coches, es una puta vergüenza.
Jeff -
davismiles -
davismiles -
lorena -
Erri-Berri -
Qué grande encontraros aquí un día festivo desde el cibercafé de Olite, que básicamente está lleno de chavales de esa edad indefinible entre los 8 y los 11, jugando al ordenador, que me miran y me preguntan contra quién juega el Erri-Berri el domingo.
"Adiós, Marañón"
"Adiós, chaval"
charly -
A todo esto, ¿qué carajo hay en Valencia?