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la vida es amagar

A caballo

A caballo Esta pasada madrugada, a unos 300 metros de mi casa, una grúa ha retirado la estatura ecuestre de Franco de Nuevos Ministerios. Según dice la noticia la retirada se realizó de forma pacífica, aunque varios partidarios de derechas e izquierdas se acercaron hasta el lugar para protestar y apoyar respectivamente el desmantelamiento. La gente tiene muy pocas cosas que hacer.

Yo encantado de que la quiten. Quizás podrían también quitar el resto de referencias franquistas de la ciudad (167, dicen) y juntarlas todas y hacer un museo del terror con efectos de luz, actores maquillados y música de ultratumba.

Pero bueno, lo más interesante es que el Ministerio de Fomento ha ordenado que se convoque un "concurso de ideas" para "reemplazar" la estatua ecuestre. Desde aquí, quiero participar con una humilde idea: una estatua ecuestre (para que el cambio no sea tan radical) de Clint Eastwood con sombrero y barba de cuatro días. No me digáis que no sería molón.

3 comentarios

Luk -

Larga vida a Jeff Tweedy y Wilco!!

charly -

a mí lo que me preocupa es que hubiera gente ahí por la noche viendo cómo se llevaban la estatua.

Justo ayer pensaba dedicar un post a esta gentre, que lo mismo va a ver cómo sale brito arceo de la casa de GH VIP que va a recibir al equipo olímpico de vela a Barajas, yo no sé si es una sociación pro-tiempo libre o qué.

Erri-Berri -

¡Uf!

De Franco a Clint Eastwood.

Sinceramente creo que todo monumento, por Ley Orgánica o mandato ministerial, debería ser, siempre, antiguo.

Los monumentos, sobre todo las estatuas, si no están viejos, son una horterada. A los monumentos, el valor se lo da el paso de los años. Sólo en ese caso pueden

a) tener mérito artístico o arqueológico o histórico o lo que sea.
y

b) estar olvidadas, sucias y feas, con las letras borradas (o arrancadas, como la palabra España del de la plaza de la Virgen Blanca de Vitoria), que en ese caso tienen muchíismo encanto.

Fuera de los dos casos descritos, la palabra monumento, aparte de a Mónica Bellucci, me recuerda al metacrilato, que es una horterada. Bosque de los ausentes incluido.